¿Estás pensando en establecer un programa de reciclaje en tu comunidad, edificio habitacional, escuela, hospital, fábrica o edificio corporativo? Si es así, es probable que te preguntes qué tanto vale la pena invertir en infraestructura y si realmente con estas acciones es posible lograr un cambio positivo en el medio ambiente.
Seguramente has escuchado algunos mitos sobre el reciclaje, por ejemplo que el proceso contamina más de los beneficios que ofrece o que existen problemas ambientales en los que es necesario enfocarse. En este artículo, desmentimos siete de estas creencias comunes, mediante una perspectiva realista sobre su viabilidad y sus beneficios.
Mito 1: Reciclar es caro
Uno de los mitos más extendidos es que el reciclaje es una práctica costosa. Sin embargo, la realidad es que puede ser económicamente beneficioso a largo plazo, tanto para quien implementa la separación de residuos, como para la economía en general.
- La inversión inicial en infraestructuras de reciclaje, como contenedores especializados, puede recuperarse a través de la venta de materiales reciclados y la reducción de costos asociados con la eliminación de residuos no reciclables.
- Respecto del proceso involucrado para la recuperación de materiales, los avances tecnológicos y el aumento de la conciencia ambiental, han hecho que los costos asociados al reciclaje disminuyan significativamente.
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Mito 2: Reciclar contamina más que lo que se recupera
Otra creencia general es que los beneficios ambientales que ofrece el reciclaje no son tan considerables comparados con la contaminación que se genera durante el proceso.
- Esta idea surge porque procesar los materiales para recuperar materia prima virgen conlleva el uso de energía, pero lo cierto es que cuando los materiales no son extraídos de la naturaleza, sí se ahorran procesos y recursos.
- Otra realidad es que la evolución de la tecnología y las técnicas aplicadas al tratamiento de los materiales, mediante el uso de maquinaria cada vez más ecoamigable, ha mejorado la eficiencia de los sistemas de reciclaje.
- Por otro lado, el reciclaje ayuda a reducir la cantidad de residuos que llega a los vertederos, que son una fuente de contaminación del agua y del suelo y emiten gases de efecto invernadero.
Mito 3: En los camiones de basura se mezclan los residuos
Ante esta idea errónea, la realidad es que en diversas comunidades y ciudades, existen programas de recolección en diferentes días de la semana, para evitar que los residuos reciclables se mezclen con los orgánicos o con los no reciclables.
- En algunas otras ciudades se utilizan camiones diseñados con compartimentos diferenciados para diversos tipos de desechos, mismos que incorporan sistemas eficientes de segregación, asegurando que los materiales reciclables se mantengan aislados, para poder conservar aquellas propiedades que los hacen reciclables.
- Por otro lado, si no existe este tipo de recolección en el servicio público, es posible fomentar la participación ciudadana en la separación de residuos en origen, utilizar contenedores para el acopio y resguardo de materiales y finalmente, implementar la logística necesaria para llevarlos a plantas especializadas en procesamiento.
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Mito 4: Los productos reciclados son de peor calidad
¿Que los nuevos productos fabricados con materiales reciclables no son duraderos? ¡Nada más alejado de la realidad! porque los procesos de reciclaje más avanzados permiten recuperar las propiedades originales de la materia, para poder fabricar nuevos elementos de buena calidad.
- Un ejemplo es el vidrio reciclado que se puede utilizar para fabricar nuevas botellas y frascos con las mismas características de los elaborados con materia virgen; lo mismo sucede con otros elementos, como el aluminio, que es usado para producir nuevas latas y recipientes con la misma resistencia.
- Por otro lado, en el caso del reciclaje industrial, donde se recuperan algunos materiales generados durante el proceso de fabricación, como plástico, metales o papel, se logra obtener materiales limpios y uniformes que pueden regresar fácilmente a su estado original.
Mito 5: El sector del reciclaje sabotea algunos empleos
Este mito sugiere que la implementación de programas de reciclaje puede perjudicar a la economía al eliminar o disminuir empleos en otros sectores, relacionados con la extracción o refinamiento de la materia prima.
Sin embargo, la industria del reciclaje también genera empleo, desde la recolección y clasificación hasta la gestión de instalaciones y el desarrollo de tecnologías sostenibles. Es un sector en crecimiento que contribuye al bienestar económico a largo plazo.
Por mencionar un ejemplo, datos de Naciones Unidas dan cuenta que el sector del reciclaje actualmente brinda empleo a un aproximado de 12 millones de personas, en total en Brasil, China y Estados Unidos.
Mito 6: Hay estrategias más importantes que el reciclaje
Aunque existen numerosos problemas ambientales que requieren atención y otras estrategias para contribuir a una actitud responsable, lo cierto es que el reciclaje sigue siendo esencial, debido a que la gestión correcta de los residuos es un paso importante para reducir la contaminación y evitar la extracción de nuevos materiales.
- Como parte de una estrategia global donde se suman esfuerzos, al recuperar algunos materiales para obtener nuevamente materia prima, contribuimos directamente a la conservación de recursos naturales y a la reducción de la huella de carbono.
- De acuerdo con cifras globales, la extracción de recursos ha aumentado más del triple desde 1970, con un incremento del 45% en el uso de combustibles fósiles. De manera que evitar la extracción de nuevos materiales, mediante el reciclaje, sí marca una diferencia.
Mito 7: El reciclaje es complicado y requiere mucho esfuerzo
Algunos creen que el reciclaje es un proceso complicado y demandante. Sin embargo, con la disposición en un lugar correcto de contenedores adecuados para la separación y una educación completa sobre cómo distinguir los diversos tipos de residuos, el reciclaje puede ser sencillo y eficiente.
Por otro lado, también es necesario contratar un servicio de recolección, con la frecuencia adecuada, para evitar desbordamientos y al mismo tiempo garantizar que los materiales tengan un destino correcto, en plantas donde recibirán el procesamiento esperado.
ConclusiónDesmitificar las creencias erróneas sobre el reciclaje es esencial para fomentar prácticas sustentables en comunidades y organizaciones. Conocer la verdad detrás de los esfuerzos por recuperar materiales contribuye a fomentar una cultura de responsabilidad y la cooperación para contribuir a la preservación del medio ambiente.
